Una paciente de 29 años falleció en el hospital Herminda Martín de Chillán tras ingresar con un diagnóstico inicial de absceso retrofaríngeo, el cual evolucionó rápidamente hacia una condición grave, resultando en su muerte.
Los síntomas y la progresión de la enfermedad eran consistentes con una infección por estreptococo pyogenes, una bacteria conocida por causar complicaciones serias y a veces fatales.
Desafortunadamente, no se realizaron cultivos bacteriológicos a la paciente, lo que ha impedido la confirmación oficial de la presencia de estreptococo pyogenes como agente causal.
Esta omisión ha generado incertidumbre y preocupación, especialmente porque este caso trae a la memoria la muerte de Agustín Oyarce Lobos, un niño de siete años que también falleció debido a una infección causada por la misma bacteria el pasado 14 de abril.
Hasta el momento, la Seremi de Salud no ha emitido una respuesta oficial sobre este caso, a pesar de las repetidas solicitudes de información por parte de diversos medios de Ñuble.
La falta de confirmación bacteriológica ha complicado los esfuerzos para entender completamente la situación y tomar medidas preventivas adecuadas.
Este suceso resalta la importancia de realizar diagnósticos precisos y rápidos en casos de infecciones severas, y pone de manifiesto la necesidad de una vigilancia más rigurosa y de respuestas más ágiles por parte de las autoridades de salud frente a posibles brotes de enfermedades infecciosas.