Muere Héctor “Tito” Noguera, leyenda del teatro y la televisión chilena, a los 88 años
El arte chileno está de luto. Este martes se confirmó el fallecimiento del destacado actor Héctor Noguera, a los 88 años, uno de los intérpretes más influyentes y queridos del país.
Reconocido por su enorme trayectoria en teatro, cine y televisión, el artista seguía activo hasta hace pocas semanas, participando en la teleserie Aguas de Oro de Mega y en la obra Caballo de feria, escrita y protagonizada por él mismo.
Nacido en Santiago el 8 de julio de 1937, Noguera —conocido cariñosamente como Tito— inició su vida profesional en la arquitectura, carrera que abandonó para dedicarse por completo a la actuación. Se formó en la Pontificia Universidad Católica de Chile, donde comenzó una trayectoria que lo llevaría a convertirse en uno de los pilares del Teatro UC y, posteriormente, del teatro chileno en su conjunto.
En las tablas, fue protagonista y director de innumerables montajes, entre ellos La vida es sueño, La pérgola de las flores y Teo y Vicente cegados por el sol. Además, fue docente, mentor de nuevas generaciones y fundador del Teatro Camino, compañía que estableció en Peñalolén y que se transformó en un espacio clave para la escena nacional.
Su última creación teatral, Caballo de feria, estrenada en mayo de este año, fue una reflexión íntima sobre el arte, la ficción y la amistad.
Ícono de la televisión chilena
En televisión, debutó en 1976 con Los días jóvenes en Canal 13, dando inicio a una carrera que lo consagró como uno de los rostros más importantes de las teleseries nacionales. Su paso por TVN en los años 90 marcó una época dorada con personajes memorables como Melquíades Antich en Romané y Federico Valdivieso en Sucupira, dos de los roles más recordados de la ficción chilena.
En los 2000, Noguera volvió a hacer historia interpretando a Ángel Mercader en Machos, de Canal 13, personaje que se transformó en parte del imaginario popular y consolidó su vigencia artística. Luego participó en producciones de Chilevisión y Mega, entre ellas Perdona Nuestros Pecados y Como la vida misma.
En una de sus últimas entrevistas, Noguera aseguraba que no pensaba dejar de trabajar: “Mientras tenga energía, quiero seguir actuando”, decía. Esa vocación lo acompañó hasta el final, incluso mientras enfrentaba problemas de salud que lo obligaron a disminuir su ritmo de trabajo.
Reconocimientos y legado
A lo largo de su carrera, Héctor Noguera recibió los principales galardones del mundo cultural chileno: el Premio APES en dos ocasiones, la Medalla de Santiago, la Medalla Honorífica del Senado y el Premio Nacional de Artes de la Representación y Audiovisuales en 2015. También fue homenajeado por sus pares en los Premios Caleuche por su trayectoria.
Su compromiso con el teatro, la docencia y la cultura lo convirtieron en una figura transversalmente respetada, admirada tanto por sus colegas como por el público.
Hasta hace pocas semanas, seguía trabajando en televisión y en los escenarios, confirmando que su amor por el arte nunca se detuvo. Con su partida, Chile despide a un artista incansable, un maestro y un referente que deja un legado imborrable.
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