Una importante disminución en los delitos de robo en lugar no habitado registró el centro de Chillán, según el último balance de Carabineros de la 2ª Comisaría, que reportó una baja del 73% en comparación con la misma semana del año pasado.
El registro, correspondiente al Cuadrante 1 —que comprende el perímetro de las cuatro avenidas principales—, muestra un retroceso significativo de este delito que afecta a locales comerciales, bodegas, colegios y oficinas, entre otros recintos sin uso habitacional.
El Jefe de Operaciones de la Zona Ñuble, coronel Diego Salas, explicó que el resultado responde a un trabajo “de inteligencia con foco en la prevención”.
“Carabineros planificó una serie de servicios diurnos y nocturnos con patrullas motorizadas, equipos mixtos, drones y vigilancia estratégica, lo que permitió adelantarse a la acción delictual y frustrar ilícitos”, sostuvo.
La estrategia, añadió, incluye georreferenciación de delitos, denuncias de locatarios y alertas de sistemas de seguridad, lo que ha permitido focalizar los recursos en los puntos más vulnerables. En lo que va del año, las detenciones por este delito han aumentado en un 78%, según cifras policiales.
Sin embargo, el coronel Salas advirtió que la baja penalidad de este ilícito y la falta de sistemas de seguridad en algunos locales siguen siendo factores de riesgo.
“Hay antisociales con hasta 90 reiteraciones por el mismo delito. Son detenidos y vuelven a las calles a robar, incluso en los mismos lugares. Por eso es fundamental que los dueños refuercen accesos y denuncien cualquier movimiento sospechoso”, enfatizó.
Desde Carabineros destacaron que la coordinación con Seguridad Municipal y la colaboración ciudadana han sido claves para mantener la tendencia a la baja y reforzar la percepción de seguridad en el centro de Chillán, una zona donde el comercio y las oficinas históricamente han sido blanco de este tipo de robos.
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