Chillán ha registrado un aumento significativo en la incautación de cigarrillos de contrabando durante el primer trimestre de 2024, con un incremento de más del 600% en comparación con el mismo periodo del año pasado.
Un estudio de microtráfico realizado por ALTO reveló que entre enero y abril de este año se decomisaron 4.600 cajetillas en la región de Ñuble mediante 78 procedimientos policiales.
Según el informe, la ciudad de Chillán se destacó como la principal zona de decomisos, con 4.500 cajetillas incautadas en 72 operativos.
Coihueco le siguió, aunque con cifras mucho menores: 70 cajetillas en 2 procedimientos. Este notable incremento se atribuye a la intensificación de las intervenciones y fiscalizaciones por parte de Carabineros de Chile y la Policía de Investigaciones (PDI).
El comercio ambulante y las ferias se identificaron como los principales canales de venta de estos productos ilegales, representando el 92,3% de todas las microincautaciones.
Esta actividad ilícita afecta no solo la economía formal, sino también la salud pública, ya que los productos de contrabando no cumplen con las normativas de seguridad y salud.
De acuerdo con los resultados de la Encuesta de Consumo de Tabaco y Comercio Ilícito 2023, realizada por el centro MIDE UC, se estima que el 49% de los cigarrillos comercializados en la Macrozona Centro -que incluye a las ciudades de Talca y Chillán- son de contrabando. Además, el 81% de estos cigarrillos ilegales se venden a un precio igual o menor a $1.500, lo que se debe a la evasión de impuestos.
El informe de ALTO subrayó que la región de Ñuble es una de las que presenta la mayor variación positiva a nivel nacional respecto al volumen de cajetillas ilegales retiradas del mercado.
“Solo en Chillán, el aumento es de un 640% en comparación con el mismo periodo de 2023”, destacó el documento.