Exautoridades de Ñuble Denuncian Estancamiento en Proyectos Energéticos

Cristóbal Jardua y Manuel Cofré, quienes ocuparon los cargos de intendente y seremi de Energía, respectivamente, durante la administración del fallecido expresidente Sebastián Piñera, expresaron su preocupación por el estancamiento en el desarrollo de proyectos energéticos en la región de Ñuble.
Esta preocupación surge tras el quinto fracaso consecutivo en la licitación para ampliar la línea de 66 kV Charrúa-Chillán, una obra valorada en US$ 6.393.909, crucial para el futuro energético de la región.
Las críticas apuntan a un “nulo avance” en la materialización de nuevas iniciativas que garanticen la oferta energética necesaria a partir del año 2028.
Jardua calificó la situación como “la guinda de la torta” de una gestión deficiente, destacando la falta de un seremi titular durante siete meses y el incumplimiento de las promesas hechas por la actual administración.
Ambos exfuncionarios resaltaron la importancia de una planificación energética a largo plazo, criticando la gestión actual por continuar inaugurando proyectos iniciados por la administración anterior sin presentar nuevas propuestas significativas.
En particular, mencionaron la ausencia de Ñuble en el Plan de Expansión Eléctrica 2022 y el rechazo de proyectos urgentes, destacando una falta de visión para atender las crecientes necesidades de la región.
Manuel Cofré también cuestionó el modelo de licitación adoptado para los proyectos Charrúa-Chillán y Monterrico-Cocharcas, señalando su alto riesgo y la eventual ausencia de oferentes.
Además, criticó la demora en la realización de estudios para cuantificar la demanda energética de la región, lo que a su juicio solo contribuye a retrasar el desarrollo de Ñuble y perpetuar los niveles de pobreza.
Ante este escenario, ambos exautoridades han solicitado al gobierno la organización de una reunión de emergencia que involucre a actores clave del sector energético y a representantes de los gremios de Ñuble, con el objetivo de establecer propuestas claras y metas concretas para el desarrollo energético de la región.
Subrayan la necesidad de un plan regional integrado que permita una planificación efectiva y la rápida implementación de soluciones que respondan a las demandas actuales y futuras de Ñuble en materia energética.