En una jornada que marcó el termómetro, Chillán registró una temperatura máxima de 34°C a las 15:00 horas del 26 de diciembre, según datos suministrados por el aeródromo Bernardo O’Higgins.
La ciudad, conocida por sus veranos cálidos, experimentó condiciones meteorológicas que intensificaron la sensación de calor, con una humedad relativa que descendió hasta el 25%.
El viento sopló desde el norte a una velocidad de 6 nudos, lo que no aportó alivio significativo al calor reinante.
La visibilidad se mantuvo en 10 km o más, y el cielo estuvo despejado de nubes por debajo de los 5.000 pies, sin la presencia de nubes ni fenómenos meteorológicos significativos que afectaran el aeródromo o sus inmediaciones.
Este escenario térmico se acompaña de una presión atmosférica de 1012 hPa y un punto de rocío de 11°C, factores que, combinados, han hecho de este día post Navidad uno especialmente sofocante para los habitantes y visitantes de Chillán.